Ursula · Familia
Bélgica "Pasamos un día absolutamente inolvidable en esta excursión en barco. Mis hijos y yo quedamos maravillados de principio a fin. Esta experiencia quedará grabada en nuestros recuerdos.
El encantador barco de madera ofrece un paseo agradable y auténtico. Navegar así nos permitió redescubrir las playas que habíamos visitado días antes, pero desde una perspectiva completamente diferente. Admirarlas "desde el otro lado de la cortina" fue una revelación, una perspectiva igual de diferente y magnífica.
Descubrir Cala Fighera y Sella del Diavolo fue impresionante. Y las paradas para hacer snorkel, organizadas en un ambiente relajado, sin prisas, contribuyeron a esta sensación de serenidad. Por si fuera poco, el capitán es muy atento y siempre te sirve un aperitivo y un prosecco. Recomiendo encarecidamente esta excursión."