Detalles
No hay nada más tranquilo que un paseo en barco a lo largo de la costa bajo las suaves luces del atardecer mientras bebes un poco de vino y admiras el volcán Etna desde el mar. Acompáñanos en este relajante viaje en barco desde Aci Trezza y disfruta de las vistas.
Salimos del puerto de Aci Trezza y nos dirigimos hacia el sur, navegando por el Área Marina Protegida de las islas Cíclopes. Pasaremos por delante de la isla de Lachea, con su extraordinaria riqueza natural y arqueológica, y continuaremos por la costa hacia el castillo normando de Aci Castello, y las "cuevas de Ulises". Si te apetece, puedes sumergirte en el agua y darte el último baño del día.
Con las cálidas y suaves luces de la puesta de sol y un poco de vino para beber, te parecerá increíble estar en el mar. Durante el viaje, nuestro patrón también te ofrecerá aperitivos locales para que los pruebes.
Destacado
- Admira la costa al atardecer con el Etna de fondo
- Disfruta de un aperitivo mientras te dejas arrullar por las olas
- El último baño del día en el Área Marina Protegida de las islas Cíclope
Salida y regreso
Nos encontramos en la tienda de souvenirs frente al puerto 30 minutos antes de la hora indicada. Entra en la tienda y pregunta por Daniele, tu patrón. Si llegas en coche, puedes aparcar gratuitamente en el aparcamiento de Via Lungomare, a pocos metros de nuestro punto de encuentro. Al final del viaje en barco, volveremos al punto de partida.
Características del barco
- Número de pasajeros: 8
- Área protegida del sol
- Solo se admiten perros de asistencia
- No hay baños
- Accesible a los carritos plegables
- No es accesible para sillas de ruedas
Servicios incluidos
- Aperitivo: vino, cerveza, refrescos y comida local
- Patrón
Requisitos
- No recomendable para personas con problemas de corazón
- Se requiere un mínimo de 2 participantes en total para que la actividad se lleve a cabo
Conviene saber
- Dependiendo de las condiciones meteorológicas y del mar, puede haber algunos cambios en la hora de salida
- Los bebés deben sentarse en el regazo de sus padres