

Porque no quería pasar el día con una multitud. Lo prefiero pequeño pero dulce
Experiencia muy grata, con un grupo reducido (éramos 12 personas) acompañados de dos profesionales que nos llevaron a un paraíso terrenal, haciendo escala en algunas de las calas más famosas del archipiélago. Cada parada va acompañada de un snack, un aperitivo, un almuerzo a base de pasta con salsa de gambas y un snack para finalizar.
Todo estuvo excelente. La tripulación, el barco, la limpieza, los lugares visitados. El barco era espacioso y estaba cómodamente equipado. Los grupos pequeños hicieron que fuera más cómodo y más fácil hablar con los demás.





