

Un momento inolvidable con el plus añadido de poder ver 2 delfines y 1 ballena.
Un entorno excepcional y paisajes sublimes. Compartimos este momento en familia con un piloto brillante y sumamente respetuoso con el medio ambiente. En alta mar, la guinda del pastel, mientras pensábamos en ver delfines, nos topamos con un cachalote que pudimos admirar a apenas 5 metros de distancia. Gracias al piloto por este momento mágico.
Un recorrido inolvidablemente hermoso. Gran parada para nadar y hacer snorkel. Ejecución impecable del recorrido con un conductor de barco competente. Además de las maravillosas impresiones de Scandola, otro punto destacado fue el avistamiento de delfines en el camino de regreso.





