

Fueron muy amables y auténticos. Fue un placer que me recogieran en el hotel y la playa era preciosa. ¡Lo recomiendo muchísimo! :)
¡Qué pasada! Reservamos una clase de surf familiar con mis dos hijos (de 13 y 17 años) y lo pasamos genial. Felipe y Ricardo fueron un equipo de ensueño: súper profesionales, priorizan la seguridad, pero con la energía surfera perfecta para que la experiencia fuera divertida. Se aseguraron de que aprendiéramos a surfear bien, no solo a quedarnos de pie y rezar. Desde remar como pingüinos hasta deslizarnos con estilo, aprendimos muchísimo y, de alguna manera, conseguimos parecer bastante cool al final de la sesión. Ahora nos sentimos lo suficientemente seguros como para alquilar nuestras propias tablas e impresionar a los bañistas inocentes con nuestras nuevas habilidades. Una experiencia increíble: nos reímos, aprendimos y surfeamos. ¡Recomiendo esta escuela de surf a cualquiera que quiera empezar con buen pie! 🤙
Fue una experiencia maravillosa. Al final de la lección y empezando como un absoluto neófito pude pararme en la tabla y coger las olas más simples de forma independiente.





