

Todo fue perfecto: la comunicación, la hospitalidad, la disponibilidad, el brunch y, por supuesto, la amabilidad del Capitán Leo. Sin duda, volveremos pronto y con mucho gusto.
Un viaje muy agradable. El capitán Leo estuvo realmente atento a las necesidades de todos, tanto niños como adultos. Fue una persona muy amable y agradable que también nos dio consejos interesantes sobre lugares para visitar. El barco estaba impecable y el almuerzo fue excelente. Leo fue muy atento, incluso con mi hijo de 6 años, que tenía algo de miedo.





